Goodbye Earth se queda como una promesa más de Netflix

Desde que se dio a conocer la premisa de Goodbye Earth, pintaba para que fuera uno de éxitos rotundos como Squid Game o Kingdom, pero solo se quedó en una promesa. Tenía mucho potencial, pero los problemas del cast pudieron más al final, pero de eso te cuento más adelante. 

Goodbye Earth nos cuenta que la Tierra, en el 2026, será impactada por un asteroide, por lo que la población de Asia Pacífico solo tiene 200 días para evacuar a su población antes del desastre.

En Corea del Sur, el anuncio causa caos y se ven sumergidos en un conflicto civil que pone a los niños en la mira de los traficantes, mientras el ejército se ve diezmado por unos soldados rebeldes. A partir de esto se van desarrollando varias historias en un pequeño poblado, mientras la cuenta regresiva no se detiene. 

Lo bueno de Goodbye Earth

Goodbye Earth se estrenó el 26 de abril, después de un año que se había anunciado su estreno por un tema del que hablaré más adelante. Contó con 12 capítulos de aproximadamente una hora y está basada en el libro El tonto del fin del mundo de Kōtarō Isaka. 

El cast está conformado por Yoo Ah-in, Ahn Eun-jin, Jeon Sung-woo, Kim Yoon-hye, entre otras caras conocidas en los papeles secundarios.

Desde los primeros anuncios de la serie, se veía que esta prometía para ser el próximo éxito al nivel del Juego del Calamar; yo la tenía en mi lista de lo más esperado del 2023 junto a The Worst of Evil y El monstruo de la vieja Seúl, pero Netflix la atrasó hasta su estreno este año y, bueno, mejor empiezo por las cosas rescatables. 

Para empezar, y lo que compete a este espacio, es importante resaltar la idea principal que se vendió, y es relevante resaltar esta parte, ya que se mostró como una historia del fin del mundo estilo 2012. 

La idea era buena, se veía como una buena premisa y que Netflix había invertido un buen presupuesto en la producción, pero, como mencionaré más adelante, la ejecución no fue la mejor. 

Los primeros cuatro capítulos son consistentes en cuanto a la premisa y la construcción de la tensión por la llegada del asteroide, el caos y la reciente llegada de Ha Yoon-sang (Yoo Ah-in) de sorpresa es buena, tiene un buen ritmo, pero con el pasar de los capítulos esto va cayendo poco a poco. 

Cabe mencionar que la idea para Goodbye Earth se basó en el libro El tonto del fin del mundo de Kōtarō Isaka, el cual es una recopilación de seis cuentos, los cuales tiene como protagonistas a diferentes vecinos de un edifico y refleja su realidad tras la noticia de la llegada del asteroide y cómo es que lo aceptan. 

Se nota que se intentó tener varias historias dentro de la serie como para seguir la narrativa del material original, y por ello tenemos un cast extenso, con varias pequeñas historias que se intentan ligar con la trama y subtrama principales, pero no logran desarrollarse por completo. 

Entrando en este punto del cast, en lo personal me parece que la mayoría del cast hace un gran trabajo con sus papeles y sus historias, quizá la que menos me convence es Ahn Eun-jin como Jin Se-kyung, que a momentos me parece que está sobreactuando y hay características de su personaje que no me convencen del todo, pero esto se puede deber a las modificaciones que sufrió la producción. 

Para cerrar esta parte de las cosas rescatables, también tengo que mencionar el soundtrack, las canciones me parecieron buenas, bien utilizadas y hasta eso memorables, sobre todo la del inicio, solo con From y Yellowjackets me había pasado que dejara la cortinilla solo para escuchar la canción. 

Lo que impidió que fuera el siguiente éxito de Netflix 

Ahora los problemas visibles que tiene la serie, que recaen en agentes externos, pues tiene que ver con los problemas legales que enfrenta el actor Yoo An-in, quien está enfrentando un juicio muy mediático por abusos de sustancias. 

Lamentablemente en Corea es más penado y perseguido el consumo de drogas que otros crímenes, como los relatados en Silences u otras producciones. Esto ha llevado a que el actor fuera retirado de la secuela de Hellbound y que Goodbye Earth se retrasara en su estreno. 

En un principio parecía que la serie no se iba a estrenar, pero por el costo de producción y algunas presiones se decidió sacarla, se decidió sacarla, no sin antes pasar por las tijeras para reducir la aparición de Yoo en pantalla, cosa que trajo como consecuencia que la historia no sea consistente y ni sea coherente en muchas escenas

A partir del siguiente párrafo hay spoilers, necesario para dar contexto de por qué falla esta producción de Netflix

Se supone que Ha Yoon-sang es un gran científico en el campo de la biotecnología, por lo que está trabajando en Estados Unidos desarrollando un importantísimo proyecto sobre modificación embrionaria. 

Tras la noticia de la colisión vemos que su laboratorio es “atacado” y dejamos de saber de él por un buen rato hasta que de repente, por un deus ex machina, llega a Corea, es interceptado por la policía que lo amenaza que se tiene que reportar todos los días a las 5:00 p.m. y en una escena random vemos que fue torturado y parece que le pusieron un chip, pero todo esto a partir del capítulo tres o cuatro deja de importar. 

Esto deja ver que solo recortaron las escenas al azar y eso se nota más cuando durante gran parte de la trama, varios de los personajes que buscan salir del país a toda costa mencionan que el personaje de Yoo es la clave, que él es su boleto de salida, pero nunca se explica el porqué ni vemos algo que nos indique que maneje una información ultrasecreta como para que su personaje tenga valor. 

De hecho, el personaje de Yoo termina pareciendo más uno de los secundarios, otra historia que no termina de conectar con la que parece ser la trama principal, que es la venganza de la maestra Jin Se-kyung, por la muerte de varios de sus alumnos a manos de unos traficantes. 

Esta trama, la que viene siendo la principal, tampoco se salva de problemas en su ejecución. No sé si culpar a todos los recortes que se nota que hubo o que simplemente no supieron cómo desarrollar la historia a la par de las de los ciudadanos y la élite de la ciudad. Quisieron abarcar mucho en poco tiempo. 

Posiblemente, si hubieran seguido la narrativa de la historia original no hubieran tenido este desastre de querer tocar temas que van desde un culto piramidal, pasando por traficantes de niños, una traición en el ejército, la que parece una estafa de unos búnker hasta la venganza de la maestra, más varias cosas que van saliendo y a eso sumarle el fin del mundo, todo en 12 capítulos. 

No puedo asegurar que si hubieran dejado la serie intacta, tal y como se filmó hubiera funcionado, por lo mismo de que hay muchas cosas que quieren resaltar, pero por lo menos creo que hubiera tenido un poco más de sentido. Además, no tengo pruebas, pero tampoco dudas de que está seguro era una serie de 16 capítulos y no de 12, porque se nota que quitaron mucho contenido de Yoo Ah-in. 

Otra opción como para rescatarla hubiera sido hacer lo que hicieron con Sabuesos, de cambiar la historia, pero seguro que Netflix no quiso invertir en regrabaciones, ya que al momento del inicio de la investigación Goodbye Earth ya estaba terminada.

Al final, Goodbye Earth terminó por dejarme con sentimientos encontrados; esperaba mucho, recibí poco de los que se prometió, tiene muchos problemas argumentales, hay cosas rescatables (los primeros 4 capítulos son buenos) pero no termina de convencerme con el lío que son las historias. 

Por lo menos mantuvo un nivel decente como para que la continuara viendo, no como El Problema de los Tres Cuerpos que la abandoné a la mitad del tercer capítulo y decidí apostar por el libro y la adaptación china. 

¡Feliz maratón! 

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